miércoles, 28 de julio de 2010

Primera caída


Después de siete meses entrenando juntos, cuatro días a la semana, ayer probé el suelo.Íbamos por el camino de siempre, por detrás se acercaban varios ciclistas, para que Lagun no les molestara, me orillé y sujeté con fuerza la línea de tiro; al mismo tiempo tropecé. No pude recuperar el equilibrio ¡Menudo trompazo! No sabía cómo reaccionaría mi compañero de carrera ante una caída. Cuando se dio cuenta de que me estaba arrastrando, paró. Después se empeñó en lamerme las heridas. Hoy estoy más dolorida y magullada que ayer. Dos días de descanso y seguiremos con el canicros.
En la foto, Lagun nada más colocarle el arnés dispuesto para salir corriendo, eso sí, a mi ritmo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario