martes, 27 de septiembre de 2011

La fête de la Corniche

El domingo fue un día estupendo, la carretera que une Hendaya con Sokoa por la cornisa estuvo cerrada al tráfico, desde las nueve de la mañana a las ocho de la tarde. Los coches se sustituyeron por paseantes, ciclistas, patinadores, corredores e incluso carros arrastrados por caballos que trasladaban a la gente de un lado a otro.
Es una experiencia muy especial correr o pasear por donde normalmente es imposible hacerlo.
Aproveché para exhibir a mis galgos, mucha gente me paró para hablar sobre esta raza, todo el mundo sabe lo que sufren en manos de los cazadores, les hicieron fotos y provocaron exclamaciones como Ils sont magnifiques! Ils sont tres gentiles! Ils sont beaux! mientras sentían escalofríos al recordar el maltrato que sufren.






domingo, 25 de septiembre de 2011

Más robos

-Ten cuidado, son muy hábiles en robar comida.
Así me despedí del amigo que se quedaba con mis perros. Un viaje de ida y vuelta.
-Txuri ha estado muy contenta, Neska y Pixka no han comido nada y los galgos nos han birlado un plato de sopa, un trozo de queso, una barra de pan, un puñado de almendras y de ¡bellotas!
Así me recibió mi amigo al volver.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Diferentes formas de marcar

Lagun tiene diferentes estilos y lugares para mear. A veces, levanta la pata tanto  que pierde el equilibrio. Regar la rueda de un coche con el conductor dentro es una modalidad predilecta para él, yo miro para otro lado, como si no fuera mi perro,  pero noto la mirada asesina de la víctima en mi cogote, también puede mojar inesperadamente la pierna de la persona con la que estoy hablando o a su perro. Para disimular digo:
 -Uy, eso no lo ha hecho nunca.
 Todo lo tiene que marcar, después lo airea bien, a menudo ya no le queda orina en la vejiga, no le importa, olisquea y levanta la pata aunque no caiga ni gota. Otras se mea así mismo, a su pata delantera, para mí sería un error de cálculo y me sentiría ridícula. Él sigue con su chulería. No se salva de este bautizo amarillo Lira que soporta estoicamente unas gotas en su cabeza o lomo.
Txuri, una de mis perritas viejitas, cuando era joven, exhibía una forma muy original: ¡levantaba las dos patas traseras!



Vamos, entre unos y otros, llevo un circo andante.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Atardecer

Pasear por el campo con los perros al atardecer  es un placer que  reconcilia con uno mismo. La luz se va apagando, los rayos del sol templan la piel sin quemar, las sombras se atenúan, los sonidos son más leves, oigo los pasos de mis perros y mios sobre el camino, seguimos el ritmo de la tierra. Acompañamos a las ovejas que vuelven a su redil mientras los pájaros espacian los cantos, las voces de los humanos casi susurran. El silencio arropa a la naturaleza que se prepara para soñar en un mundo sin maltrato a los animales.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Emboscada de gatos

Eso hemos sufrido hoy. Lagun y Lira conviven con Pintxito, el gato de casa, sin problemas, incluso duermen con él. Pero con los de la calle tienen declarada la guerra. Y llego el momento de su venganza. Cuando volviamos del paseo a casa, sin avisar han empezado a salir debajo de un coche, cinco, seis gatos, bufando, saltando y sacando todas sus armas. Me he quedado paralizada, sin saber qué hacer. Derrotados hemos entrado en nuestro refugio con la autoestima derretida por los suelos.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Tres meses sin correr

Tres meses. Este es el tiempo que tenía que estar sin correr según el cirujano. No he podido aguantar.  Estos días grises y la temperatura templada han sido un imán irresistible.  He salido a trotar sin perros. Aún tengo miedo a atarme a ellos, desterraré el mosquetón fijo y lo cambiaré por uno de fácil liberación. He sentido el cuerpo como una losa pero contenta de volver a experimentar las sensaciones de correr. Son los inicios de la vuelta a la normalidad.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Ladronzuelo

Vuelvo del supermercado y empiezo a guardar la manduca. Yo diría que he comprado un Kg de peras. Lo habré dejado en la caja.  Una bolsa rota en el jardín, sin rastros de fruta,  disipan la duda. Miro directamente a los galgos ¿quién ha sido? Lagun desvía la mirada y se va a ladrar al aire.
Es rápido corriendo pero robando comida no le gana nadie.